Ir al contenido principal

Amor animal

En un mundo en el que no es permitido estar solo, David, un hombre que acaba de romper con su esposa, llega a un hotel en el que tiene 45 días para encontrar pareja o será convertido en el animal de su elección: una langosta. Para acumular días extras deberá salir a cazar ‘solitarios’, aquellos que se han escapado del lugar y que tienen prohibido enamorarse.

The Lobster es la película de 2015, donde el director y guionista Yorgos Lanthimos presenta una historia retorcida y sarcástica, en la que la búsqueda romántica parece más una dictadura humillante, que todo el tiempo enfatiza la desgracia de no estar en una relación.

En su primera parte, cuando se presenta el régimen del hotel, el director consigue describir la atmósfera del lugar de una manera que espanta y que, a la vez, genera expectativas sobre lo que sucederá con el protagonista, que es interpretado de forma magnífica por Colin Farrell.

Visualmente, los espacios también van siendo descubiertos, en un recorrido que se asemeja a la presentación del The Overlook Hotel, en el Resplandor, pero con una amenaza mucho más siniestra y deprimente.

Al salir, se abren los planos generales, para mostrar el bosque, la ciudad y el paisaje desolado, todos con tonos tierra que combinan con las vestimentas y demás detalles de escenografía, encajando perfectamente con la trama de la historia.

Respecto al guion, escrito por Lanthimos y Efthimis Filippou, se puede decir que es una crítica mordaz a la conquista amorosa y a la superficialidad de la atracción, con un toque humorístico que no disfrutarán todos, pero que para los amantes del humor negro será un deleite.

El elenco, en el que se encuentran Rachel Weisz, Léa Seydoux, Ben Whishaw y John C. Riley, hace un muy buen trabajo y parece ser el indicado para narrar este tipo de historias; ninguno opaca al protagonista, pero todos dejan una marca con sus personalidades bien definidas, lo que también es un logro de la producción.

No obstante, La langosta tiene un pero. Su complejidad narrativa puede ser agotadora, ya que después de que se comprende la dinámica de un escenario, el espectador debe conocer uno nuevo, en el que también hay reglas y personajes elaborados. Si estos no son asimilados a tiempo, se corre el riesgo de perder el hilo y aburrirse, sin ver el impactante final.

Una historia transgresora de las tradiciones románticas, un director poco conocido y ningún pudor para retratar la irracionalidad de quien busca encajar a toda costa son los atributos que convierten a este filme en una pieza que debe ser revisada. No importa si hay un flechazo inmediato, si el amor se da con el tiempo o si, al terminar, solo queda la opción de convertirse en animal, y ver la siguiente película.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

El abogado del mal

Richard Ramsey es un abogado que siempre pierde. En su historial de juicios no se encuentra ninguno exitoso, y él mismo lo reconoce. Su nuevo cliente es el hijo adolescente de una pareja amiga, principal sospechoso del asesinato a sangre fría de su padre, y que desde el inicio del proceso no ha querido decir nada. Con muchos factores en su contra: huellas dactilares en el cuchillo y una confesión en el lugar de los hechos, Ramsey tiene el deber de conseguir la pena mínima para el joven, a costa del historial maltratador del padre y de cualquier vacío que detecte en el argumento rival. Keanu Reeves y Renée Zellweger protagonizan The Whole Truth o, su mal logrado título en español, El Abogado del Mal, que desde el primer momento será asociada con El Abogado del Diablo, de 1997, para desvelar poco a poco una historia mucho más monótona. La corte es el escenario casi permanente del filme, en el que se recrean los elementos de un juicio: el discurso de cada uno de los legistas

La justificación de la maldad

En el año en el que los fanáticos de las películas de superhéroes esperaban el cierre del Universo Cinematográfico de Marvel, una película con diez veces menos presupuesto ratificó que la esencia del cine está en el contar una buena historia, más allá de cualquier consideración técnica o despliegue millonario: el Joker. Por una rara enfermedad, Arthur Fleck no puede parar de reír, lo que podría considerarse como una gran ventaja para alguien que trabaja como payaso. Sin embargo, su risa no es de alegría es un lamento por una vida donde solo ha primado el dolor y la tragedia.  Responsable de una madre enferma, sin una figura paterna de referente, atrapado en un trabajo donde nadie lo toma en serio, víctima de la crueldad de los indolentes, Arthur se aferra a la cordura a través del servicio de beneficencia pública donde encuentra alguien que lo escucha y lo medica, mientras en su vida diaria solo sueña con llegar a ser un cómico famoso capaz de hacer feliz a los demás. 

El hombre callado

“Cuídense del hombre callado, porque mientras otros hablan, él escucha; mientras otros actúan, él planea, y cuando ellos finalmente descansan, él ataca”, Anónimo. ¿Cuánto poder pueden tener los vicepresidentes? y ¿Qué tan responsables son de lo que sucede en sus gobiernos? Dick Cheney fue el 46º vicepresidente de Estados Unidos, compañero de fórmula de George W Bush, y uno de los estrategas republicanos más influyentes de los últimos tiempos, quien a pesar de no tener una figura visible en los medios de comunicación, sí estuvo detrás de muchas de las acciones más recordadas del gobierno que vio caer el World Trade Center. Adam McKay, el director conocido por su excelente uso del sarcasmo y su gusto por desvelar escándalos, se le midió a sacarlo del anonimato y presentar su ascenso al poder y lado más oscuro, en el drama político Vice, que aspira a ocho premios Óscar, entre ellos Mejor Película. La primera característica que salta a la vista desde el pri