Cate Blanchette
Cate Blanchet es el estandarte sobre el que se sostiene Blue Jasmine, la sensacional cinta del, ahora polémico, director Woody Allen. El neoyorquino convirtió a la actriz australiana en su nueva musa inspiradora para mostrar la decadencia de la clase alta y ella no es inferior al reto, cumple a cabalidad, sobrepasa las expectativas.
Cate interpreta a Jasmine, una mujer que ha caído en bancarrota y tiene que acudir a la ayuda de su media hermana para poder sobrevivir, sin embargo, en su psiquis se conserva la fastuosidad, el lujo y la imponencia de su anterior clase social, congeniar su subconsciente con la nueva vida es el semblante que muestra genialmente la actriz. Para la posteridad quedan los diálogos, los gestos y la sensación de haber visto un film que, a través de una historia sencilla trasciende los límites del alma.
Cate interpreta a Jasmine, una mujer que ha caído en bancarrota y tiene que acudir a la ayuda de su media hermana para poder sobrevivir, sin embargo, en su psiquis se conserva la fastuosidad, el lujo y la imponencia de su anterior clase social, congeniar su subconsciente con la nueva vida es el semblante que muestra genialmente la actriz. Para la posteridad quedan los diálogos, los gestos y la sensación de haber visto un film que, a través de una historia sencilla trasciende los límites del alma.
Sandra Bullock
Ryan Stone, le permite a Sandra Bullock, en Gravedad, mostrarse como una mujer desesperada por sobrevivir, en algunos momentos sin esperanza, con el sentir de que todo está en sus manos.
Un papel exigente, en el que interpretar una situación que pocos han experimentado de una manera tan espontánea y real, la deja muy alejada de la chica Miss Simpatía, que solo quería hacer reír. Su interpretación logra que el público sienta la angustia, la falta de aire y el afán porque ella cumpla su objetivo, capturando por completo la atención.
Bullock demuestra su crecimiento actoral, las herramientas que ha adquirido a lo largo de su carrera, y las capacidades que hoy la convierte en una de las mejores en su oficio.
Un papel exigente, en el que interpretar una situación que pocos han experimentado de una manera tan espontánea y real, la deja muy alejada de la chica Miss Simpatía, que solo quería hacer reír. Su interpretación logra que el público sienta la angustia, la falta de aire y el afán porque ella cumpla su objetivo, capturando por completo la atención.
Bullock demuestra su crecimiento actoral, las herramientas que ha adquirido a lo largo de su carrera, y las capacidades que hoy la convierte en una de las mejores en su oficio.
Comentarios